Marta tenía dieciocho años cuando cruzó la puerta del bar de Mati por primera vez en busca de un empleo.
Entonces no era más que una cría asustada y desesperada por conseguir la independencia que tanto buscaba. Por algún motivo, consiguió ablandar a la dueña del bar y quedarse con el puesto de camarera a pesar de ser la criatura más torpe que Mati había visto nunca.
Hoy, diez años después, Marta es una aspirante a escritora que se ha convertido en una mujer segura de sí misma, aunque también en una conquistadora que va quedándose un pedazo del corazón de cada una de las mujeres a las que conoce, hecho que horroriza a Mati.
La vida de Marta da un giro descomunal el día que consigue un nuevo empleo y se cruza por primera vez con Carmen, una diseñadora que hará latir el corazón de Marta de un modo hasta entonces desconocido para ella. ¿Inconveniente? No tiene claro si Carmen tiene algún interés en ella, y en caso de tenerlo debe ponerse a la cola, porque su rival es nada más y nada menos que su jefa, y esta no está dispuesta a que la nueva llegue y le arrebate algo que considera suyo.